google5b980c9aeebc919d.html

domingo, 31 de mayo de 2009

OBRAS DE AUTORES REGIONALES



"LUNERA", un poemario de Diego Martín Antón


En un mundo plagado de violencia y dolor, aún podemos encontrar un espíritu como el de Diego Martín Antón que, con sus palabras de amor, nos transporta a los más hermosos momentos por los que todos hemos transitado en alguna oportunidad. El amor hallado, el amor perdido, el amor añorado, el amor que sufre, el amor que da vida, ¡el amor!
En este poemario, que él llamó “Lunera”, con mensajes salidos de su corazón, este joven chubutense nos deleita con temas que llegan a lo más profundo de nuestras almas. Su mente le abre camino a las emociones y las expresa libremente, sin trabas, sin pudor, con dulzura, en una entrega total de cuerpo y esencia hacia ese ser que ama.

Cuando nos dice:
Tú…necesidad de necesitarte;
voz que acalla las voces constantes,
razón de ser, tu mitad… mi parte…

…uno puede verse reflejado en los sentimientos más puros, que brotan de su corazón y nos refrescan como el agua de un puro manantial, haciéndonos creer en el amor que todos llevamos dentro, pero Diego Martín Antón tiene a flor de piel.

Prof. Hilda Elina Lucci www.hildalucci.com.ar





Palabras del autor a modo de prólogo y reconocimiento:


Dejo antes estas hojas sujetas, mis versos, mis palabras. Todo lo que aquí he expuesto, simplemente nace desde el sentir complejo de mi alma. Cada poema conjuga sensaciones vividas he imaginarias. Creo fervientemente en las utopías constructivas y en las realidades obtenidas ante cada instante que pasa.

Estas letras simples aducen matices sensibles, narrando esencias de significados tangibles que van desde una mirada legible, a alguna sonrisa cómplice o hasta lágrimas obviadas por dispersas nostalgias. He pensado muchas veces que la vida no solo nos enseña a vivir de recuerdos o premisas vanas, sino que son los tiempos expuestos los que sabrán acomodar cada estrofa en este libro permeable de afectos ante los ojos de quien lea mis palabras.

Agradezco la realización de mi primer libro a mi abú querida, por compartir su corazón y sabiduría infinita, a mis padres y hermanos por tanto amor brindado y por enseñarme a crecer día a día. Quiero agradecer a mis sobrinos por sus mágicas y alegres sonrisas, a mis amigos de siempre, por tantas historias brindadas; por la lealtad impagable y por su paciencia divina.

Dejo este humilde homenaje, a las mujeres que han sabido corresponder mis besos, a las que han sabido moldear cada fibra de mi ser, a las que amé, a las que ya olvidé, a aquellas que han compartido sus fugaces caricias.

Agradezco a todas las personas que han comprendido esta vocación necesaria, a los que siempre han estado y estarán, a usted lector, por permitirle a este aprendiz de las letras y de la expresión…compartir unos instantes de su alma.


Diego Martín Antón

Ficha técnica de la obra:

Diseño de Tapa: Diego Martín Antón
Dibujos: Pamela Lewis / Diego Martín Antón
Edición: Proyecto G - Leonardo Rago
Nombre del Autor: Diego Martín Antón
Dirección E-mail: lexus_ar@hotmail.com
Blog Personal: http://antondiego.blogspot.es/
Ciudad / Provincia: Trelew/ Chubut
Región / País: Patagonia /Argentina
Título del Libro: "Lunera"
ISBN: 9789870555797





miércoles, 27 de mayo de 2009

LOS POEMAS DE HOY



HOY: DOS POEMAS DE MARIO CABEZAS (*)


COMODORENSE

Mi patria es arcilla y arena volada,
mi tierra es petróleo y desierto venteado,
mi alma es el golfo rompiendo en la costa,
mi anhelo es un puerto del mar adorado,
mis penas son vientos silbándole al Chenque,
mi fe, Comodoro, un pueblo esforzado...



PETROLERO DE TURNO

(Al obrero de mi tierra)

Petrolero salpicado de infinito,
disfrazado de astronauta taciturno,
estremeces las estrellas asombradas
con el trépano de tu agitado turno.

Y tus manos embreadas acarician
los corales del océano viscoso
y en lo alto de la noche planetaria
resplandece tu petróleo junto al pozo.

El desierto solitario te apuñala
hasta el fondo de tu alma entumecida,
entre tanto, soldador de caños fríos,
tu electrodo de centellas, cobra vida.

Las arterias palpitantes de petróleo
en la oscura eternidad se han enterrado
y escalando dinastías arcillosas
van pulsando el infinito desolado.

Los fantasmas galopantes de la pampa
desparraman sus estrellas escarchadas
y en el frío yacimiento de la estepa
se adormecen tus angustias trasnochadas

Embotado tu cerebro por el viento,
tu entereza sometida a deterioro
y tus ojos agotadas por tinieblas;
te suplican el regreso a Comodoro.

Y el Oriente de mi pampa amanecida
sonrojado se sublima con su rito,
ya tus ojos de retorno se adormecen,
petrolero salpicado de infinito...


(*) Poeta y narrador de Comodoro Rivadavia. Estos poemas fueron publicados en su libro “Remolinos”.






martes, 26 de mayo de 2009

NOVEDADES CULTURALES

Certamen Patagónico Poema Ilustrado 2009

Artículo 1) La Municipalidad de Perito Moreno, a través del Centro Municipal de Cultura abre la convocatoria del XXIVº Salón Anual Municipal del Poema Ilustrado, el que estará dedicado a dos categorías: *ESCRITORES Y ARTISTAS PLÁSTICOS:Premio Consagración Regional *ESCRITORES Y ARTISTAS NOVELES:Premio Iniciación

Artículo 2) Podrán participar del Salón todas las personas interesadas , con domicilio legal en las provincias de
la Patagonia Argentina.

Artículo 3) Serán recibidas Obras Inéditas (que no hayan sido impresas ni expuestas en muestras, cartillas, antologías, libros, etc. tanto para la imagen como para el poema). Deben ser originales, presentadas sobre soporte rígido de madera terciada, fibrofácil o similar, con espesor no menor a
0,5 cm ni mayor de 1 cm, unido a bastidor tipo mural, con listones a los cuatro lados. Las obras serán montadas sin vidrio, cubiertas con acetato transparente o acrílico rígido. Cada obra deberá estar acondicionada para ser colgada en la exposición (pitones, ganchitos, hilo o cualquier elemento que sea preciso y resistente).

Articulo 4) El tema será libre y la imagen y el poema deberán conformar una sola Obra: el poema impreso en la ilustración. La impresión del texto como la creación de la imagen podrá realizarse con técnicas simples (dibujo, pintura) y mixtas (inclusión de fotografía, transfer, collage, imagen digital, etc). Si bien las técnicas a utilizar serán libres, en cada obra deberá estar presente cierta intervención manual.

Artículo 5) Cada autor podrá presentarse con un máximo de dos (2) obras enviando cada obra individualmente.

Artículo 6) Si una Obra es de dos autores (Ilustración y Poema ) en cada trabajo deberá firmar su autor, como lo realice usualmente.

Articulo 7) No serán admitidas las siguientes Obras: a) Las No comprendidas en los Artículos 2º y 3º. b) Las Obras anónimas , los calcos, las reproducciones o copias , quedando establecido que la comprobación del plagio inhabilitará a los artistas a presentarse en posteriores ediciones. c) Las Obras realizadas con materiales o procedimientos precarios, de peso excesivo o cuyo plástico imposibilite la correcta apreciación de la obra. d) Las de artistas fallecidos. e) Las que no tengan las firmas de los autores. f) Dibujos , pinturas o ilustraciones con el poema adherido, si en conjunto figuran dos partes. g) Las que en cualquiera de sus lados excedan
80 cm. o sean menores de 40 cm. h) Las de autores menores de 16 años. i ) Las que en su técnica de creación de imagen y texto, no tengan, a criterio del jurado una intervención manual mínima. j ) Las de autores (de poema o imagen) que presenten obras en ambas categorías.

II) DE
LA RECEPCIÓN DE LAS OBRAS

Artículo 8) Las Obras deberán estar correctamente embaladas, debiendo ser enviadas a : Centro Municipal de Cultura ~ Municipalidad de Perito Moreno ~ Sarmiento N º 1517 ~ CP (9040) ~ Perito Moreno- Santa Cruz. En su interior y dentro de un sobre cerrado deben figurar los datos personales de los autores:

Nombre y Apellido-Dirección- Teléfono- e-mail - Categoría en la que participa - Precio de
la Obra (si estuviera a la venta y no fuera premiada) y otros datos que crea convenientes . En otro sobre aparte deberán presentar 4 (cuatro) copias del poema, con el nombre de la Obra, categoría y firma.

Artículo 9) En las dos cubiertas del embalaje debe figurar la leyenda “CONTIENE POEMA ILUSTRADO”, la categoría en la que participa y declarar remitente completo.

Artículo 10)
La Municipalidad de Perito Moreno, a través del Centro Municipal de Cultura tomará las precauciones y recaudos necesarios para que las obras sean devueltas en igual estado en el que se hayan recibido, pero no se responsabiliza por ningún deterioro o extravío que pudiera sobrevenir por causas imprevistas o ajenas a ella.

Artículo 11) Las obras serán recibidas hasta el día jueves 31 de Julio de 2009 inclusive ( se tomará en cuenta la fecha de envío según sello postal).

III) DEL JURADO

Artículo 12) A los efectos de la admisión de las obras y adjudicación de premios se constituirá un Jurado de selección, el que será oportunamente nombrado.

Artículo 13) El Jurado se reunirá en el Centro Municipal de Cultura , trabajará a puertas cerradas, y una vez que se haya expedido, su fallo será inapelable.

Artículo 14) El Jurado seleccionará a su vez entre los artistas de Perito Moreno que no resultasen premiados, una Obra para ser reconocida con
la Mención Estímulo “Obra de Valor Local”.

Artículo 15) Los miembros del Jurado no podrán ser participantes del Salón en ninguna de sus categorías ni optar por las recompensas instituidas.

IV) DE LOS PREMIOS

Artículo 16) Los montos de los Premios serán los siguientes:

PREMIO “CONSAGRACIÓN REGIONAL” para Categoría ESCRITORES Y ARTISTAS PLASTICOS
1º Premio Adquisición: $ 2.200,00.- y Diploma.
2 º Premio Adquisición: $ 1.600,00.- y Diploma.

PREMIO “INICIACIÓN”: para Categoría ESCRITORES Y ARTISTAS NOVELES
1º Premio Adquisición: $ 750,00.- y Diploma.
2º Premio Adquisición: $ 450,00.- y Diploma.

Artículo 17) Los Premios pueden ser acumulativos, siempre que estén comprendidos en una misma categoría.

Artículo 18) Será instituido un Diploma a
la Mejor Ilustración y un Diploma al Mejor Poema del Salón , independiente de las obras premiadas en su conjunto, pudiendo recaer éste en las recompensas establecidas. Entiéndase que todo artista concurrente opta por los premios mientras que expresamente no haya manifestado lo contrario y que acepta el presente reglamento en todas sus cláusulas.

Artículo 19) Los Premios serán entregados en el Acto Oficial de Inauguración del Salón, en el Centro Municipal Cultural, sito en calle Sarmiento N º 1517, de la ciudad de Perito Moreno, Santa Cruz.

V) DE
LA CLAUSURA DEL SALÓN

Artículo 20) Las Obras reconocidas con Premio Adquisición serán incorporadas a la “Colección Salón Anual Municipal del Poema Ilustrado”, del Centro Municipal de Cultura de Perito Moreno.

Artículo 21) Clausurado el Salón Anual Municipal del Poema Ilustrado, las obras participantes serán devueltas a los domicilios de los autores quedando el costo de envío a cargo de
la Municipalidad de Perito Moreno.

Artículo 22) Cualquier caso no previsto en este Reglamento será estudiado por
la Municipalidad de Perito Moreno.


***




INFOCULTURA MADRYN

Municipalidad de Puerto Madryn

cultura@madryn.gov.ar - R.S. Peña 86 - 02965 472060


ACTIVIDADES PROGRAMADAS:


Viernes 5 de junio – 21 Hs.

Teatro del Muelle

Grupo Urdimbre de Trelew

Susana Quilaqueo – violín / violonchelo

Marco Vilches - charango / cuatro venezolano

Daniel Muñiz – contrabajo

Diego Corso – percusión / accesorios

Co-organizado con el Instituto de Formación Docente Artística N° 805 sede Pto. Madryn

Sábado 6 de junio – 21:30 Hs.

Teatro del Muelle

“Manzi desde el sur del sur”

Homenaje a Homero Manzi por los 100 años de su nacimiento

Espectáculo de poesía, música y danza

Dirección: Marisa Ungar

Sábado 13 de junio – 22 Hs.

Teatro del Muelle

Ciclo de Músicos Independientes

Gloria Geverovich

Domingo 14 de junio – 20 Hs.

Cine Teatro Auditórium

Ópera Dido y Eneas de Henry Purcell

Coro Estable Municipal

Mariela Schemper (soprano/Dido), Laura Delogu (soprano/Belinda), Norberto Marcos (barítono/Eneas).

Orquesta Sine Nomine

Puesta en escena: Sergio Pelacani

Dirección: Diego Lacunza

Sábado 20 de junio – 22 Hs.

Teatro del Muelle

Silvina D´agostino

SEMINARIOS | TALLERES | CLINICAS

Sábado 23 de mayo – 18:30 Hs.

Casa de la Cultura

“Ser narrador en la Argentina : proyectos, estilos y parámetros de la inspiración”

Dictado por el Lic. Hernán Bergara

19 al 26 de junio

Talleres de Expresión Roberto Spencer

“ La Rayuela y la Cerámica ”

Realización de una rayuela de cerámica destinada a un espacio público.

A cargo de Emilio Villafañe

25 al 27 de junio

Teatro del Muelle

Seminario para actores y directores de teatro

“ La Muerte de un Viajante” de Arthur Millar

Dictado por Javier Margulis

Con el apoyo del Fondo Nacional de las Artes

Julio a Noviembre

“Análisis y seguimiento de Obra”

Para artistas plásticos de la provincia

A cargo de: Claudia Del Río, Rafael Cippolini y Andrés Labaké.

Con el apoyo del Fondo Nacional de las Artes.

25 al 27 de junio

Casa del gerente del ferrocarril

“Diseño de Arte textil y Objetos”

A cargo de Carola Segura

jueves, 21 de mayo de 2009

EL CUENTO DE HOY


EL CAZADOR DE GUANACOS


Por Enrique Jorge Martínez Llenas*




Gumersindo Mansilla podía ser definido por tres cosas. Una, sus características físicas: bajo, moreno, de rasgos aindiados y de mediana edad; dos, su afición: cazador inveterado y dueño de una casi sobrenatural y ya legendaria puntería; y tres, sus gustos: una obsesiva predilección por la carne de guanaco, preparada de la forma que fuese: asada, en guiso o en milanesas. Llegaba a pasarse días en los montes aguardando la aparición de éstos animales para, siguiéndoles la pista sin descanso, detectar la mejor presa y abatirla de un único y certero disparo de su fusil, un viejo Máuser de 1930 con mira telescópica.
En cuanto podía disponer de unos días libres en su trabajo de policía local, partía de cacería hacia el campo en su vieja pero bien mantenida moto. Prefería ir solo, para estar en íntimo contacto con la tierra y los elementos, como sus antepasados indios. Pero a diferencia de ellos, que abatían sólo los guanacos necesarios para sobrevivir, Gumersindo cazaba indistintamente machos, hembras o pequeños y tiernos chulengos, que no aprovechaba por completo, sino sólo parte de los lomos, los vacíos y las ancas, dejando abandonado todo el resto a los animales carroñeros.
La que resultó ser su última partida de caza comenzó igual que tantas otras, muy temprano, a la salida del sol. Preparó sus utensilios y los guardó en dos grandes alforjas que colgaban en los laterales de su moto; luego enfundó con cuidado el fusil y se lo colgó a la espalda en bandolera; a continuación llenó de combustible el depósito de la moto, incluyendo por si acaso un bidón suplementario que fijó con sogas en el asiento trasero; y finalmente, luego de verificar la carga de su teléfono satelital y de una última revisión a su equipo, se puso unos anteojos oscuros y partió, ignorante de lo que el destino le tenía reservado.
Se fue alejando del pueblo sin apuro. La moto, con su silenciador recién cambiado, ronroneaba suavemente. La mañana fresca, soleada y, cosa rara, sin viento, lo llenaba de una íntima alegría, que se transmutó en un deseo incontenible de silbar, lo que hizo durante un buen trecho del recorrido.
Gradualmente comenzó a tomar caminos secundarios. Ya al comienzo de la tarde se encontraba circulando con cierta dificultad por una estrecha picada, donde decidió por fin detenerse bajo la escuálida sombra de un árbol achaparrado para descansar, beber agua y comer un poco del pan, queso y chorizo que había llevado. Cuando terminó de comer dio una vuelta a pie por los alrededores, en busca de los típicos montoncitos de heces de los guanacos, con las que delimitan su territorio.
Y los encontró. Cuidadosamente descolgó el fusil, ajustó la mira y, con lento sigilo se aproximó a un hueco entre dos rocas, que le permitía ver un pequeño y árido valle, a unos cien metros más abajo, en el que pacía un rebaño de diez animales, cinco de ellos hembras, cuatro pequeños chulenguitos y un macho imponente, de más de un metro ochenta de alto y que debía pesar casi noventa kilos. Dos hembras descansaban tendidas sobre el terreno, y los chulengos corrían y saltaban de aquí para allá, como es característico en los animales jóvenes. El jefe rumiaba permanentemente y se mantenía erguido y vigilante, cuidando al rebaño como era su deber. Gumersindo se decidió por matar al macho, imaginando los suculentos trozos de carne que podría obtener, sin tener la más mínima consideración por el desastre que aparejaría para el rebaño la pérdida de su jefe.
Apuntó cuidadosamente, centrando la mira en el pecho del animal y disparó, pero con tal mala suerte que justo en el preciso instante en que apretaba el gatillo, una inesperada brisa sopló polvo sobre su cara, afectando irremisiblemente la trayectoria del proyectil, que impactó en otra zona de la anatomía del guanaco, dejándolo tendido sobre la tierra, pero vivo. El rebaño, espantado por la detonación y sin la guía de su jefe, se dispersó alocadamente en todas las direcciones posibles.
Maldiciendo a todos los santos y sus acólitos, Gumersindo bajó rápidamente por la pequeña barranca hasta el valle, y se acercó con cautela hasta el animal, que aún respiraba. Lo vio levantar lenta y dificultosamente la cabeza, como para decirle algo y, curioso, se aproximó un poco más. Sus miradas se cruzaron durante un infinito instante. A continuación sintió en sus ojos el pegajoso escupitajo que, desde tan breve distancia y antes de expirar, le disparó el guanaco con impecable puntería. Sorprendido, intentó quitarse la pestilencia de la cara, pero era tan pringosa que le pegoteaba y sellaba los párpados. Necesitaba imperiosamente agua para enjuagarse, pero no tenía ni idea de cómo estaba orientado, ni dónde estaba su moto. Además, muy rápidamente comenzó a producírsele una intensa y dolorosa inflamación en todas las zonas que habían tomado contacto con la saliva del animal. Desesperado ante la repentina ceguera y el dolor, cometió la imprudencia de apresurarse para extraer el teléfono de su bolsillo, consiguiendo así que se le cayera al suelo y viéndose obligado a perder un tiempo precioso buscándolo a gatas por su alrededor. Cuando lo halló marcó al tacto el número de la comisaría del pueblo, notificó a uno de sus compañeros lo que le había sucedido, le dio una idea del paraje en el que probablemente se encontraba y lo urgió a que se apresurara a ir a rescatarlo antes de que cayera la noche.
Mientras se sentaba a esperar, tratando de contener el grito de rabia e impotencia que se le quería escapar desde lo más profundo del pecho, fue conciente de que de sus tumefactos e inútiles ojos le chorreaban ríos de lágrimas que, mezcladas con la ardiente escupida, se introducían también en la nariz, taponándola con la inflamación que producían y haciéndole necesario entrar el aire a los pulmones por la boca abierta de par en par. Se concentró sólo en respirar, ya que ver no podía, y así estuvo hasta que, después de lo que le parecieron miles de años y sin saber si era noche o día, sintió los gritos de quienes lo buscaban, a los que respondió con una voz ronca que no pudo siquiera reconocer como propia. Lo llevaron urgentemente al dispensario del pueblo, donde le lavaron con abundante agua los ojos y la cara; pero ya había pasado demasiado tiempo: las lesiones eran muy profund
Lo derivaron al hospital de referencia de la zona, pero allí solamente pudieron certificar la pérdida casi total de la visión. Dicen que un viejo médico rural, enterado del caso, comentó que los viejos indios tenían conocimiento de la existencia de cierta hierba, rara y difícil de hallar, que agradaba especialmente a los guanacos, y que debido a la mezcla reiterada con los jugos de los diferentes estómagos de dichos animales durante el proceso de la rumia, producía un componente ácido altamente corrosivo para los tejidos que no estuvieran preparados para resistirlo. Eso era lo que podía haber contenido el escupitajo del animal que había cazado Gumersindo Mansilla y que le causó la pérdida de sus órganos visuales.

Quienes actualmente viven en el pueblo o pasan por él de camino hacia otros lugares pueden ver un hombre solitario sentado permanentemente a la puerta de su casa, rumiando la secreta idea de una inútil e imposible venganza. Cuando el sol le da en la cara, la vuelve hacia sus rayos, como buscando capturar algo de la luz que todavía, aunque cada día menos, puede adivinar a través de la cicatriz informe de lo que alguna vez fueron sus agudos ojos de cazador.


*Enrique Jorge Martinez Llenas (57) es médico cardiólogo y reside actualmente en Valencia, España, con su familia. Oriundo de Buenos Aires, ha vivido en Río Grande, Comodoro Rivadavia, Mar del Plata y Neuquén-Cipolletti, por lo que -asegura- la Patagonia le resulta no sólo conocida, sino muy entrañable. Otros trabajos literarios del autor pueden leerse en :
http://escribidor-diligente.blogspot.com
y en el blog http://www.escribirte.com.ar.








domingo, 17 de mayo de 2009

EL POEMA DE HOY


Cuando el dolor parece hacernos sucumbir, la angustia aprieta el pecho demasiado fuerte, y la soledad pretende doblegarnos… es a través de la palabra escrita donde el hombre puede encontrar un refugio para su alma. Y perpetuar sus sentimientos, como hace en esta oportunidad Raúl Comes inmortalizando su amor a María.

O.S.



La última tarde


Llegué esa tarde,

ella estaba ahí, dormida

tendida en su lecho.

El sol de esa tarde de otoño

opuesto a nuestra ventana

se reflejaba en el edificio de enfrente

y nos devolvía una tonalidad rojiza

que inundaba la habitación.

Su mano inerte sobre la mía

presagiaba la muerte inevitable.

Seguramente esa sería nuestra última tarde


juntos.

Acariciaba su rostro, una y otra vez

mientras me preguntaba

por qué mi amor, por qué…

Si aún teníamos toda una vida por delante

muchos sueños incumplidos

tanto amor para brindarnos.

Incontenibles lágrimas

anegaron mis ojos.

La oscuridad de la noche me encontró

llorando sólo a su lado.

Con las primeras luces de la mañana

cansado de luchar

su corazón dejó de palpitar.

En silenciosa despedida

su vida se apagó

y la mía se partió en infinitos pedazos.

Ya nada será igual…






Raúl Horacio Comes