"COMO LAS MUTISIAS"
de Lidia E. Romero
La Subsecretaría de Cultura del Municipio de Madryn hizo entrega de la obra "Como las mutisias", el poemario más reciente de la caracterizada escritora Lidia Romero, con ilustraciones de Germán E. Rojas y diseño gráfico de Sara Roccato, prologado por Nelcis Jones y Fernando Coronato.
Además de su larga trayectoria docente, la autora ha sido ganadora de las Coronas de Plata -máximo galardón para poetas en lengua española en los Eisteddfod del Chubut- en los años 1969, 1973, 1986, 1994 y también de la Medalla de Plata -premio instituido por la Asociación San David para el certamen de poesía tradicional- en el Eisteddfod de 1994. También obtuvo la Corona del Poeta en la primera edición del Eisteddfod "Mimosa" en Puerto Madryn, en el año 2004, con el poema "Sólo así". Considerada como una de las representantes más exquisitas de la poesía chubutense, Lidia Romero ha escrito además varios cuentos y ensayos, así como el libro de poemas titulado "Chubutenses" para alumnado primario y secundario, publicado en origen por Servicoop de Puerto Madryn y luego reeditado por la Dirección de Cultura Municipal.
En la emotiva ceremonia de entrega, realizada en la sede del Museo del Desembarco de Puerto Madryn, hicieron uso de la palabra Nelcis Jones y el Subsecretario de Cultura Diego Lacunza, quienes destacaron la fecunda labor cultural y literaria llevada a cabo por la autora.
El libro contiene más de setenta poemas dedicados a variadas temáticas, aunque todas ellas hermanadas por el hilo conductor de un sello personalísimo, que revela la profunda sensibilidad de una mirada siempre atenta a las manifestaciones líricas que emanan aun de los aconteceres más simples y cotidianos: un anochecer, la copa de un sauce cobijando un patio, los paisajes marinos, un nacimiento, un momento de amistad al calor de una taza de té; testimonios de su constante estado de gracia poética.
Nos dicen en el prólogo Nelcis Jones y Fernando Coronato:
"Cuando en 1965, tras década y media de letargo, el Eisteddfod del Chubut despertó con el centenario de la colonia galesa, un poema de Lidia Romero ganó el mayor premio a la poesía en idioma castellano que existía en ese momento. No era todavia la “Corona de plata” que ganaría luego en cuatro oportunidades, pero el poema premiado en 1965 se llamaba “Centuria” y narraba, precisamente, la centuria transcurrida desde la llegada del Mimosa.
Su don se fortalece del reconocimiento que esa alegoría de 1965 le valió -por tema y oportunidad- entre la comunidad galesa del Chubut, a la que descubrió y aprendió a querer cuando se instaló en Rawson. Como patagónica, Lidia sintió admiración por los primeros colonos de la Patagonia y cosechó entre sus descendientes el mismo sentimiento.
Patagónica, amiga de los galeses, empero Lidia se sentía orgullosamente argentina gracias a las mudanzas a las que, durante su infancia y adolescencia, la condujeron los traslados de su padre ferroviario por diversas provincias.
Nada de nación ni de patria hay en las poesías de este libro (esos sentimientos que sin embargo supo enseñar tan bien como docente); en cambio nos la muestran con una sensibilidad exquisita, cantando a su valle adoptivo, respirando el mar inmenso, cobijando a sus nietos, añorando al amor que pasó de largo, filosofando ante la existencia...
Es para nosotros un privilegio conocer a Lidia desde que tuvo su casita blanca frente al mar, en Puerto Madryn, y haber trabajado con ella en los inicios de la asociación galesa de esa ciudad. Es una gran suerte poder prologar esta obra; casi toda fruto de aquella época fértil; sin duda de otra época. Ya no se escribe poesía como ésta, por eso es bueno atesorarla quizá en un libro, y guardar a ése libro -y a esta autora-, en nuestros corazones."
Saludamos con alegría la llegada de esta nueva obra, que confirma a Lidia Romero como una de las máximas expresiones de la lírica chubutense.
C.D.F.
Además de su larga trayectoria docente, la autora ha sido ganadora de las Coronas de Plata -máximo galardón para poetas en lengua española en los Eisteddfod del Chubut- en los años 1969, 1973, 1986, 1994 y también de la Medalla de Plata -premio instituido por la Asociación San David para el certamen de poesía tradicional- en el Eisteddfod de 1994. También obtuvo la Corona del Poeta en la primera edición del Eisteddfod "Mimosa" en Puerto Madryn, en el año 2004, con el poema "Sólo así". Considerada como una de las representantes más exquisitas de la poesía chubutense, Lidia Romero ha escrito además varios cuentos y ensayos, así como el libro de poemas titulado "Chubutenses" para alumnado primario y secundario, publicado en origen por Servicoop de Puerto Madryn y luego reeditado por la Dirección de Cultura Municipal.
En la emotiva ceremonia de entrega, realizada en la sede del Museo del Desembarco de Puerto Madryn, hicieron uso de la palabra Nelcis Jones y el Subsecretario de Cultura Diego Lacunza, quienes destacaron la fecunda labor cultural y literaria llevada a cabo por la autora.
El libro contiene más de setenta poemas dedicados a variadas temáticas, aunque todas ellas hermanadas por el hilo conductor de un sello personalísimo, que revela la profunda sensibilidad de una mirada siempre atenta a las manifestaciones líricas que emanan aun de los aconteceres más simples y cotidianos: un anochecer, la copa de un sauce cobijando un patio, los paisajes marinos, un nacimiento, un momento de amistad al calor de una taza de té; testimonios de su constante estado de gracia poética.
Nos dicen en el prólogo Nelcis Jones y Fernando Coronato:
"Cuando en 1965, tras década y media de letargo, el Eisteddfod del Chubut despertó con el centenario de la colonia galesa, un poema de Lidia Romero ganó el mayor premio a la poesía en idioma castellano que existía en ese momento. No era todavia la “Corona de plata” que ganaría luego en cuatro oportunidades, pero el poema premiado en 1965 se llamaba “Centuria” y narraba, precisamente, la centuria transcurrida desde la llegada del Mimosa.
Su don se fortalece del reconocimiento que esa alegoría de 1965 le valió -por tema y oportunidad- entre la comunidad galesa del Chubut, a la que descubrió y aprendió a querer cuando se instaló en Rawson. Como patagónica, Lidia sintió admiración por los primeros colonos de la Patagonia y cosechó entre sus descendientes el mismo sentimiento.
Patagónica, amiga de los galeses, empero Lidia se sentía orgullosamente argentina gracias a las mudanzas a las que, durante su infancia y adolescencia, la condujeron los traslados de su padre ferroviario por diversas provincias.
Nada de nación ni de patria hay en las poesías de este libro (esos sentimientos que sin embargo supo enseñar tan bien como docente); en cambio nos la muestran con una sensibilidad exquisita, cantando a su valle adoptivo, respirando el mar inmenso, cobijando a sus nietos, añorando al amor que pasó de largo, filosofando ante la existencia...
Es para nosotros un privilegio conocer a Lidia desde que tuvo su casita blanca frente al mar, en Puerto Madryn, y haber trabajado con ella en los inicios de la asociación galesa de esa ciudad. Es una gran suerte poder prologar esta obra; casi toda fruto de aquella época fértil; sin duda de otra época. Ya no se escribe poesía como ésta, por eso es bueno atesorarla quizá en un libro, y guardar a ése libro -y a esta autora-, en nuestros corazones."
Saludamos con alegría la llegada de esta nueva obra, que confirma a Lidia Romero como una de las máximas expresiones de la lírica chubutense.
C.D.F.
poesía
Lidia Romero
mutisias
Puerto Madryn