LOS TAMARISCOS
Por Aurelio Salesky Ulibarri (*)
Ahí
están...
Ahí donde
los hombres
pusiéronlos
de eternos reparos de los vientos.
Ahí
están..., ahí, aquí y allí...
Son marcas
de esperanzas
jalones de
avanzadas
de viejos
pobladores.
Ahí
están...
Se aroman
en los días primeros de septiembre
enracimadas
flores de cálices rosáceos
y
blanquecinos pétalos.
Sus
apretados cúmulos
como
apiñados frutos
se espigan
en el tiempo.
Ahí se
ven...
Rodeando a
las moradas
que a
trechos se levantan
allá por
las mesetas.
Entremézclanse
a veces
con álamos
y sauces,
las ráfagas
les apuran
las furias
del oeste.
Ahí, ahí
están...
Aferrados,
constantes,
prodigando
tibiezas con su firme enramado.
Trashumando
las pampas,
recorriendo
los campos,
¡cuántas
veces el hombre
se cobija a
su amparo!
¡Sufridos
tamariscos,
vallados
que se expanden,
resguardos
patagónicos que abrigan a mis lares!
(*) Escritor
chubutense, nacido en las cercanías de Dolavon
tamariscos reparo vientos viejos pobladores calices rosaceos meseta firme enramado sufridos patagonicos
1 comentario:
Salesky Ulibarri es un poeta cuya obra, difundida en su época, quedó luego tapada por el polvo del tiempo (polvo que tapa demasiado rápido tanto lo bueno como lo malo). Sin dudas, como patagónico, fue un agudo observador de las características y las particularidades del ambiente que lo rodeaba. La de los tamariscos, si bien cada vez quedan menos, es una silueta bien conocida en la región; tanto en la costa como en la meseta (que a más de uno, como dice el poeta, debe haber dado refugio). Me llama un poco la atención que no haya conocido antes los poemas de este autor, de quien sí había escuchado el nombre. Supongo que es, entre otras cosas, porque no tenemos muchas antologías de Literatura regional no contemporánea.
Publicar un comentario